Akrapovic utiliza convertidores catalíticos orientados al rendimiento que le proporcionan todas las mejoras de sonido y rendimiento a las que está acostumbrado con los sistemas de escape Akrapovic.
El convertidor catalítico es una estructura metálica en forma de panal que incorpora metales preciosos (paladio, rodio y platino) en su superficie. Estos metales convierten el monóxido de carbono venenoso y los hidrocarburos no quemados que se encuentran en los gases de escape en dióxido de carbono y vapor de agua no tóxicos.